Son las 3:38 a.m. y casi simultáneamente a abrir los ojos jalé el portátil para abrir la pantalla. Este es uno de esos sueños extraños que por su alto contenido de rareza dudo poder compartir con alguien como dicen algunos "con pelos y señas" pero tampoco quiero que quede en el olvido por que en ese parpadeo en el que viajé al mundo de morfeo... abrí una caja de Pandora con una teoría muy extraña de una historia que comienza varios años atrás....
Existió... bueno... existeee una persona a la que conocí hace muuucho tiempo. Cuando andaba yo haciendo mis pininos en internet y las ciber-amistades... xD cuando era taaaan novata que no sabía cerrar mi sesión en messenger... (afortunadamente nunca nadie se aprovechó de ello... creo!! Sólo me reclamaban a veces por que podían pasarse horas hablándome y yo no respondía :P) que en mis tiempos era la principal y la más maravillosa herramienta de mensajería instantánea que todavía extraño tantooo!! T_T en fin ¬¬ no sé ni para qué les digo esto, tampoco tiene tanto que se descolocó... :/ Y es que aunque lo de "hoy" son las redes sociales... nunca he sentido esa confortabilidad, privacidad y confiablidad al sostener una conversación "inbox" con la sencillez y emoción que como lo hacía en messenger... :') y es que entrar al desconocido mundo del internet era en ocasiones fasinante xD Aun cuando la probreza era un poco más obvia que ahora y había que andar penando de ciber en ciber :P aaagh...hfcnjwyunvfsfdvñwelk.. joder, vamos en retroceso por que como es mi costumbre ya me desvié del tema...
Bueno... esta persona siempre resultó ser muy ambigua... y aunque después me enteraría del secreto y el motivo... como que todavía no entiendo bien muchas cosas... a veces incluso temo por lo que pude llegar a contarle... si es que se lo conté a esa persona. Ok... messsenger nunca fue seguro tampoco en esos aspectos... la verdad es que sea cual sea el medio cibernético es muy difícil saber con quien estás"hablando" en realidad. Recuerdo que el conocernos no fue obra de la casualidad... pues antes de conversar por primera vez yo ya tenía referencias y betas de su personalidad, pensamiento y sentimientos... un perfil otorgado para un fin estúpido...
Creo que si hubiera ignorado aquel chasco habría podido conocer mejor y de forma más sincera la realidad dentro de tanta mierda... pero ni modo, yo sólo deseaba ayudar pero de haber sabido que estaba ante un manojo de sensibilidad, nervios, timidez y ese "secreto" que visto desde mi sitio parecía más como un trastorno de múltiple personalidad habría sido más cautelosa, cuidadosa... no habría dicho muchas cosas y menos cuando algunas de ellas no era ciertas u.u
A veces me dan ganas de que deje de negar y de que deje de fingir. De que deje de adoptar la personalidad de quien nunca podrá tener como último consuelo... eso me parece patético... ni siquiera es romántico por que no es una actitud bonita ni honesta. Es mezquina, egoísta... celosa... intolerante a la felicidad ajena. Intolerante al amor real... mientras se eleva un estandarte de amor eterno. Cretino asqueroso...conformarse con eso... es no tener amor propio...
Un día una bestia que se cree un ángel por que tiene alas le mordió el cuello... y en su supuesto afán enamorado creyó que aquello fue un beso... desde entonces resguarda esa marca... como las otras marcas de su alma y de su cuerpo.
Luego llegó una mujer hermosa en muchos sentidos... sí, sí ¡oh!
En ocasiones dice: "me recuerda a..." y se queda leyendo mis comentarios por mucho tiempo... se queda observando mi ropa, mis alas, mi andar y mi vuelo.
Ocultó su herida y me pidió que cuidará de "su ángel"... sin comprender por que pensaba que yo habría de aceptar y cargar con esa responsabilidad. Le expliqué con firmeza y seguridad que aquí no había ángeles, que no todas las alas son de seres celestiales, le di pruebas... SE TRASTORNÓ...
Ya no se acerca excusándose en un cuento sin talento. Da versiones discordantes y atontadas... lealtad, celos, olvido, resentimiento... y a ultimas veces silencio.
Resguarda esas razones por mera voluntad... pero me sigue mirando... me mira, me mira... me vuelve a mirar... lleva su mano al cuello y dice: "me recuerda a..."
El día que me aventuré a preguntar resultó que lo celos son por algo burdo y banal. Y cuanto más lo pienso más creo que no se refería a los celos sino a la envidia. En ciertas lineas sus argumentos eran más certeros y apuntaban como características más apegadas a ese concepto...
Sus celos eran del amor de mi... del color de mis alas... de lo que sabía, de lo que escuchaba... de mi ternura, de mi apertura, de mis palabras, de los detalles... de que yo no me enfrascaba en el color o la forma de unos ojos... sino de que yo era capaz de querer a alguien por su mirada....
¿Soy yo aquello que deseaba poseer si lo que anhelaba pudiera ser más como yo era... pero específicamente en su beneficio?
Asumo entonces por las señales y el sueño... que ese tremenda brecha es sólo miedo... miedo al amor, miedo a los sentimientos que sabe que puede desarrollar por mi en algún momento... miedo de enamorarse o miedo del enamoramiento que ya existe... y que no cree correcto...
Mientras tanto, al mismo tiempo que se vuelve a llevar la mano al cuello sigue repitiendo en su susurro... "me recuerda a..."
No hay comentarios:
Publicar un comentario